Condiciones de Dolor de Cuello y Espalda

Causas del Dolor de Espalda

El dolor de espalda puede ser causado por muchas enfermedades y afecciones diferentes. Algunas de estas afecciones son muy graves pero, afortunadamente, en su mayor parte, poco comunes. Estas condiciones graves incluyen: cáncer, tumores, neoplasias, artritis inflamatoria e infección. A continuación, se enumeran varias afecciones comunes que podrían causar dolor de espalda.

Esguinces/Torceduras:

Los esguinces y torceduras son dos de las causas más comunes de dolor de espalda. Comúnmente provocados por trauma, uso excesivo, falta de acondicionamiento y mecánica corporal inadecuada. El término esguince se usa cuando esta lesión ocurre en un ligamento. Por el contrario, torcedura se utiliza cuando el tejido afectado es un músculo o un tendón. Normalmente, los pacientes se quejarán de un aumento del dolor con la actividad y el alivio en reposo. El tratamiento a menudo incluye un período de descanso seguido de un programa de ejercicio terapéutico para aumentar la flexibilidad y la fuerza.

Radiculopatía: radiculopatía lumbar, que se refiere al dolor en las extremidades inferiores en forma de dermatoma. Un dermatoma es un área específica en la extremidad inferior inervada por un nervio lumbar. Este dolor es causado por la compresión de las raíces de los nervios espinales en la región lumbar de la columna. El diagnóstico de dolor de espalda y piernas comienza con un examen y una historia clínica detallada del paciente.

Escoliosis:

Se define como una desviación de lado a lado del eje frontal normal del cuerpo. Aunque tradicional, esta definición es limitada, ya que la deformidad se presenta en diversos grados en los tres planos: de la espalda hacia adelante, de un lado a otro, de arriba hacia abajo. La escoliosis es un término descriptivo y no un diagnóstico. Como tal, se realiza una búsqueda de la causa. En más del 80% de los casos, no se encuentra una razón específica y estos casos se denominan idiopáticos, es decir, de origen indeterminado. Esto es particularmente cierto en el tipo de escoliosis que se observa en las adolescentes. Las afecciones que se sabe que causan deformidad de la columna son anomalías congénitas de la columna vertebral, trastornos neurológicos, afecciones genéticas y una multitud de otras razones. La escoliosis no proviene de cargar cosas pesadas, participación atlética, posturas para dormir / estar de pie o una desigualdad menor en la longitud de las extremidades inferiores. En el manejo de esto, el juicio del cirujano, la participación de pacientes y familiares informados son tan importantes para determinar el resultado del tratamiento como las técnicas quirúrgicas. La toma de decisiones en el manejo de esto sigue siendo compleja a pesar de la disponibilidad de datos sobre la historia natural, el pronóstico de diferentes patrones de curvas, factores de tratamiento con corsés e innovaciones quirúrgicas. El manejo de esto incluye varios pasos y opciones de tratamiento: cribado y detección temprana de la deformidad, observación de cambios en la deformidad a lo largo del tiempo con un juicio informado sobre el pronóstico, intervenciones ortopédicas y no operativas, planificación y operación quirúrgica.

Ciática:

Esta es una condición que causa dolor en la parte posterior de uno o ambos muslos. La inflamación del nervio ciático (que es el nervio más grande del cuerpo, aproximadamente del diámetro de tu dedo meñique) puede ser constante o intermitente. El éxito en la resolución de este problema está directamente relacionado con el diagnóstico. La ciática puede ser causada por un nervio pinzado cuando sale de la columna lumbar o por cáncer de próstata.

Lo más probable es que el origen sea un desequilibrio estructural, pero hay tantas causas potenciales, algunas graves y otras benignas, que es mejor saber al menos que puede haber una razón grave para los síntomas. Esto no significa que no debas incorporar de inmediato una estrategia para eliminar cualquier desequilibrio estructural. En la mayoría de los casos, esto resolverá el problema. Si el problema no responde a estos esfuerzos básicos, es posible que necesites asistencia profesional. El primer esfuerzo para aliviar los síntomas de la ciática debe ser revisar el dolor de cadera. Los puntos gatillo se acumulan en el músculo piriforme forzando una contracción y estrangulación del nervio ciático. Se debe incorporar el ejercicio con pelota de tenis para ayudar a relajar el músculo piriforme. El estiramiento podría beneficiar al paciente, pero es más un ejercicio de “probar y ver”. Si no hay mejoras con este enfoque, lee acerca del Dolor de la Espalda Baja para comprender mejor la relación entre el nervio ciático y la columna lumbar. Es posible que esté indicado buscar la ayuda de un quiropráctico / ortopedista si la solución no se puede encontrar en casa.

Enfermedad Degenerativa de Disco:

La enfermedad degenerativa de disco (DDD, por sus siglas en inglés) es una condición natural del cuerpo que causa el deterioro de los discos intervertebrales. Este es un proceso gradual que suele comprometer la columna. Aunque la DDD es relativamente común, sus efectos generalmente no son lo suficientemente graves como para justificar una intervención médica significativa. El disco intervertebral es una estructura propensa a cambios degenerativos asociados al envejecimiento. Mucho antes de que la Enfermedad Degenerativa de Disco se pueda ver radiográficamente, ocurren cambios bioquímicos e histológicos (estructurales). Con el tiempo, la estructura de colágeno (proteína) del anillo fibroso se debilita y podría volverse estructuralmente inestable. Además, el contenido de agua y proteoglicanos (PG) disminuye. Los PG son moléculas que atraen el agua. Estos cambios conducen y están relacionados con la incapacidad del disco para manejar el estrés mecánico.

Hernia de Disco:

La hernia del núcleo pulposo ocurre cuando el núcleo (sustancia gelatinosa) atraviesa el anillo fibroso (estructura similar a un neumático) de un disco intervertebral (amortiguador espinal). La lesión puede provocar dolor, entumecimiento, hormigueo o pérdida de fuerza muscular. Cuando ocurre en la región del cuello tiende a afectar los brazos o las manos, mientras que las lesiones de disco en la zona lumbar afectan las piernas o los pies. Las personas de entre 30 y 50 años parecen ser vulnerables porque la elasticidad del disco y el contenido de agua del núcleo disminuyen con la edad.

Síndrome Facetario:

El síndrome facetario es un trastorno espinal común que afecta a las articulaciones posteriores y que produce dolor, rigidez e inflamación. El aumento de la tensión en las facetas provoca el estiramiento de la cápsula ligamentosa, el deterioro de las superficies cartilaginosas lisas y el aumento de la fricción en la articulación. Los síntomas de dolor, malestar y debilidad con frecuencia se localizan en la columna. Sin embargo, un pequeño porcentaje puede sentirse en las extremidades o en otras áreas del cuerpo.

Estenosis Foraminal:

Los nervios espinales pasan a través de aberturas en el costado de la columna llamadas foramen intervertebral. La estenosis del foramen ocurre cuando estas aberturas son más pequeñas de lo normal. Esta condición puede ser el resultado de una lesión, un cambio degenerativo o una anomalía congénita. La abertura más pequeña resulta en compresión del nervio. Esta irritación a menudo causa síntomas de entumecimiento, debilidad, ardor u hormigueo en la extremidad afectada. La estenosis prolongada o grave provoca una pérdida funcional.

Estenosis Espinal:

Es una afección en la que se reduce el tamaño del canal espinal. Esto puede provocar la compresión de la médula espinal. Los síntomas incluyen dolor, entumecimiento, hormigueo y debilidad. Los casos graves en realidad provocan pérdida de función e incluso discapacidad. La estenosis espinal es más común en pacientes mayores de cincuenta años. Muchos factores podrían causar estenosis, incluidas lesiones y cambios degenerativos.

Fibromialgia:

La fibromialgia es un trastorno crónico asociado con dolor, sensibilidad y fatiga generalizados en los tejidos blandos. Una persona con fibromialgia experimentará dolor cuando se presionen hasta 18 áreas específicas llamadas puntos sensibles. Presionar con cuidado sobre estos puntos específicos durante un examen causa molestias o dolor. El dolor de la fibromialgia es más común que los dolores musculares normales después de un esfuerzo físico. La fibromialgia suele ser lo suficientemente grave como para interrumpir el trabajo y las actividades diarias de una persona. Se desconoce la causa de la fibromialgia.

Osteoporosis: 

La osteoporosis se denomina comúnmente “enfermedad de los huesos frágiles”. Se debe a la pérdida de densidad ósea causada por una deficiencia de nutrientes para la formación de huesos como el calcio, la vitamina D, otras vitaminas y minerales. La complicación más común de la osteoporosis es la fractura por compresión, que en personas con osteoporosis avanzada, pueden ocurrir como resultado de actividades diarias simples como agacharse, llevar cargas pesadas o una caída menor.

Osteoartritis (DJD):

La osteoartritis, también llamada enfermedad degenerativa de las articulaciones (DJD, por sus siglas en inglés), es el tipo más común de artritis. La OA ocurre en casi cualquier articulación del cuerpo, pero más comúnmente en los dedos, las caderas, las rodillas y la columna. Con el tiempo, se producen cambios en las superficies cartilaginosas lisas de la articulación. Estos cambios conducen a una pérdida de elasticidad y el cartílago se vuelve rígido o quebradizo, lo que lo hace susceptible a lesiones. Esto provocará rigidez, dolor y crepitación en la articulación. Los casos avanzados en realidad resultan en un daño significativo al hueso en sí.

Espondilolistesis:

Sucede cuando una vértebra se desliza hacia adelante (traslación) en relación con las vértebras adyacentes. La estabilidad es inversamente proporcional al grado de traslación. La capacidad de una vértebra para “deslizarse” en relación con su vecina puede ser causada por muchos factores, incluida la degeneración de las facetas o del disco, un trauma o un defecto en una región de las vértebras llamada pars interarticularis. Los casos graves podrían generar compresión de la médula espinal o del nervio y tal vez requieran una intervención quirúrgica.

Fracturas y Dislocaciones:

Pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo. Los cuerpos vertebrales que ayudan a soportar el peso de la parte superior del cuerpo en ocasiones se rompen y provocan una fractura por compresión. Este tipo de fracturas son muy dolorosas e incluso incapacitantes y es importante que el médico determine su naturaleza. Algunas son causadas por afecciones peligrosas o graves, como cánceres, neoplasias malignas u osteoporosis avanzada y se denominan fracturas patológicas. Otros tipos pueden ocurrir por eventos traumáticos. Una dislocación es un término que se usa para describir una afección en la que una articulación se ha roto y se ha separado hasta el punto en que los dos huesos adyacentes ya no están alineados ni se tocan. Cuando se disloca una articulación, la columna se vuelve inestable y no pierde la capacidad de proteger a la médula espinal o los nervios.

Fractura de Compresión:

Ocurren en cualquier vértebra (huesos espinales) y se describen como un colapso de la vértebra. Síntomas: dolor de espalda repentino y severo que permanece en un área local. Algunas personas pueden experimentar entumecimiento / hormigueo o debilidad en los brazos o piernas si la médula espinal o los nervios que se alejan de la fractura se han comprimido. Si suceden múltiples fracturas en un área de la espalda, la persona desarrollará una curvatura hacia adelante similar a una joroba. Causas: hay muchas razones posibles de fracturas por compresión. Los accidentes automovilísticos, las caídas y el debilitamiento de los huesos debido a patología (cáncer) u osteoporosis son comunes. Diagnóstico: se basa en la observación de los síntomas antes mencionados y las radiografías de la columna vertebral. Es posible que se necesiten pruebas adicionales (gammagrafía ósea, análisis de sangre) para diagnosticar la causa real de la fractura por compresión.

Cáncer:

Si tienes dolor de espalda severo, es natural preguntarse si el dolor podría ser un signo de cáncer. Los tumores en la columna vertebral causan dolor por la expansión del hueso o por su debilitamiento, lo que a su vez resulta en fracturas de la columna, compresión (pellizco) de los nervios o inestabilidad de la columna.

Discitis:

La discitis, o infección del espacio discal, es una lesión inflamatoria del disco intervertebral que se presenta en adultos pero con mayor frecuencia en niños. Su causa ha sido objeto de debate, aunque la mayoría de los autores creen que es infecciosa. La infección probablemente comienza en una de las placas terminales contiguas y el disco se infecta de forma secundaria. El dolor de espalda severo que comienza de manera insidiosa es característico de la enfermedad. Discitis en los niños: aunque la mayoría de los niños seguirán caminando a pesar del dolor, los niños pequeños podrían negarse a caminar. El hallazgo característico es la extensión de la columna y la negativa total del niño a flexionar la columna. Los niños con discitis no suelen tener enfermedades sistémicas. Rara vez tienen temperatura elevada y su recuento de glóbulos blancos suele ser normal. Sin embargo, la velocidad de sedimentación de eritrocitos suele aumentar. Las radiografías laterales de la columna revelan un estrechamiento del espacio discal con erosión de las placas terminales vertebrales de las vértebras contiguas. La gammagrafía ósea es útil para localizar una lesión que es difícil de diagnosticar clínicamente. Algunas gammagrafías óseas son falsamente negativas, por lo que el diagnóstico de infección del espacio discal no debe descartarse simplemente porque la gammagrafía ósea sea normal. Las imágenes por resonancia magnética (IRM) parecen ser útiles para identificar una infección del espacio discal.

Cifosis:

Es la inclinación anormal de la columna hacia adelante. En la cifosis, la curva de la columna es anormal y forma una joroba. ¿Qué está pasando en el cuerpo? La columna vertebral normal se redondea ligeramente en el área del pecho, con arqueamiento en las regiones de la espalda baja y el cuello. La cifosis excesiva puede ocurrir principalmente en el área del tórax de la columna, lo que hace que la redondez de la espalda parezca exagerada ¿Cuáles son los signos y síntomas de la condición? Los síntomas suelen ser mínimos, a menos que la deformidad sea grave. En ese caso, la espalda duele o, en raras ocasiones, surgen problemas nerviosos. Los isquiotibiales, o los músculos de la parte posterior del muslo, también pueden estar tensos ¿Cuáles son las causas y riesgos de la condición? La cifosis generalmente es causada por una postura anormal. Otras posibles causas incluyen: una fractura significativa de la vértebra, hace que la espalda se incline hacia adelante, cirugía de la columna vertebral,  enfermedad de Scheuermann, que provoca el acuñamiento de las vértebras. Esta enfermedad generalmente se observa en varones adolescentes y se desconoce su causa. Enfermedad de Pott, que se refiere a cifosis debida al colapso de la vértebra cuando la tuberculosis infecta la columna vertebral, osteoporosis en mujeres ancianas, que genera un tipo de cifosis conocida como joroba de viuda, tumores espinales o cirugía para extirparlos, trastornos nerviosos.

Lordosis:

Es un trastorno definido por una curva excesiva hacia adentro de la columna. Se diferencia de las curvas normales de la columna en las regiones cervical, torácica y lumbar, que son, hasta cierto punto, cifóticas o lordóticas. Las curvas naturales de la columna colocan la cabeza sobre la pelvis y funcionan como amortiguadores para distribuir la tensión mecánica durante el movimiento. La lordosis se puede encontrar en todos los grupos de edad. Afecta principalmente a la columna lumbar, pero ocurre en el cuello (cervical). Cuando se encuentra en la columna lumbar, el paciente parece inclinado hacia atrás, las nalgas más prominentes y, en general, una postura exagerada. Una lordosis lumbar puede ser dolorosa a veces afectando el movimiento. Ciertos procesos patológicos afectan negativamente la integridad estructural de la columna y contribuyen a la lordosis. Algunas causas comunes incluyen acondroplasia, discitis, cifosis, obesidad, osteoporosis y espondilolistesis.

Hipertrofia Ligamentosa:

Los ligamentos suben y bajan por la columna vertebral. La hipertrofia de los ligamentos en el canal vertebral (el ligamento longitudinal posterior – corre hacia arriba y hacia abajo a lo largo de la parte posterior de los cuerpos vertebrales y el ligamento amarillo – corre hacia arriba y hacia abajo debajo del anillo óseo posterior formado por la lámina y la apófisis espinosa) puede hacer que aumenten su masa lo suficiente como para estrechar el canal (estenosis) a veces hasta el punto de comprimir la médula espinal y / o las raíces nerviosas que atraviesan el canal. Cuando el ligamento longitudinal posterior al frente y el ligamento amarillo detrás de la médula espinal se hipertrofian, la médula está casi “circunferencialmente” rodeada y comprimida. La hipertrofia del ligamento amarillo lateralmente cerca de la articulación facetaria también puede contribuir al estrechamiento foraminal (estenosis) con posible compresión del nervio (pellizco). 

Obesidad:

Según la Asociación Estadounidense de Obesidad (AOA, por sus siglas en inglés), el 64,5 por ciento de los estadounidenses adultos (alrededor de 127 millones) están categorizados como con sobrepeso. La lamentable verdad es que la obesidad se está convirtiendo en una epidemia mundial que afecta a adultos y niños. Conexión con el dolor de espalda: la mayoría de la gente sabe que la obesidad contribuye al desarrollo de enfermedades coronarias, diabetes, hipertensión arterial y cáncer de colon. Sin embargo, ¿sabías que la obesidad es un factor que contribuye al dolor de espalda? Es verdad. Tener sobrepeso puede contribuir significativamente a los síntomas asociados con la osteoporosis, osteoartritis (OA), artritis reumatoide (AR), enfermedad degenerativa del disco (DDD), estenosis espinal y espondilolistesis. La columna está diseñada para soportar el peso del cuerpo y distribuir las cargas encontradas durante el descanso y la actividad. Cuando se carga con exceso de peso, la columna vertebral se ve obligada a asimilar la carga, lo que puede provocar compromiso y daño estructural (por ejemplo, lesiones, ciática). Una región de la columna vertebral que es más vulnerable a los efectos de la obesidad es la zona lumbar, la columna lumbar. La falta de ejercicio y acondicionamiento corporal provoca poca flexibilidad y músculos débiles en la espalda, la pelvis y los muslos. Esto puede aumentar la curva de la espalda baja y hacer que la pelvis se incline demasiado hacia adelante. Además, esto es perjudicial para una postura adecuada y, a medida que la postura se debilita, otras regiones de la columna (cuello) podrían volverse dolorosas. Puedes intentar descartar la causa de algunos de estos trastornos de la columna en el proceso de envejecimiento normal. Es cierto que con la edad los tejidos corporales generan cambios en la anatomía espinal. Sin embargo, si tienes sobrepeso o eres obeso, es probable que tengas o tendrás dolor de espalda.

Trauma:

El trauma en la columna se refiere a una lesión que se ha producido en elementos óseos, tejidos blandos y / o estructuras neurológicas. Las dos cosas que más preocupan a los cirujanos, en el caso de un traumatismo espinal, son la inestabilidad de la columna vertebral y la lesión neurológica real o potencial. La estabilidad de la columna vertebral puede verse comprometida cuando se lesionan elementos óseos o hay una ruptura de los tejidos blandos como los ligamentos. La inestabilidad hace que la espalda no pueda soportar con éxito las cargas normales, lo que puede provocar una deformidad permanente, dolor intenso y, en algunos casos, lesiones neurológicas catastróficas. Muy a menudo, la inestabilidad proviene de una fractura en una de las partes óseas de la vértebra, específicamente el cuerpo vertebral, la lámina o los pedículos. En el caso de un trauma, las dislocaciones y las fracturas ocurren simultáneamente y pueden resultar en una columna vertebral muy inestable. Pueden ocurrir en cualquier región de la columna y están asociados con cierto grado de lesión neurológica. Un cirujano necesita restaurar la estabilidad mecánica de la columna para intentar prevenir más lesiones neurológicas, deformidad progresiva o dolor por incapacidad prolongada.

Dolor de espalda durante el embarazo:

Para las mujeres embarazadas, el dolor de espalda durante el embarazo no es un asunto trivial. Si no se aborda, puede tener un impacto negativo en su estilo de vida diario, causar pérdida de tiempo en el trabajo y dificultar el parto. El dolor de espalda durante el embarazo también crea problemas que continuarán durante un período prolongado después del parto. Si bien es bastante común, definitivamente no debe aceptarse como parte del proceso. Para ayudar a que tu embarazo sea lo más placentero posible y facilitar el parto, el dolor de espalda siempre debe tratarse lo más rápido posible y manejarse durante todo el embarazo. El dolor lumbar de larga duración (varias semanas o meses) es un predictor de dolor de espalda posparto (dolor después del parto). Por esta razón, se alienta a las mujeres embarazadas a buscar el tratamiento adecuado. Asimismo, cualquier dolor posparto que dure más de seis a ocho semanas debe tratarse para evitar problemas de espalda crónicos o recurrentes.